El posmodernismo se ve aquí primero en su superficie: la nueva cultura de los modos de vida en las grandes metrópolis, un estado de opinión sobre cuestiones políticas, socia¬les, estéticas que irradia desde los pensado¬res del pos-estructuralismo francés: Deleuze, Foucault, Lyotard, Guattari. La potencia del análisis sociológico de Scott Lash desgaja lue¬go el fenómeno en diversos aspectos hasta componer con estos un gran cuadro de con¬junto que lo lleva a proponer una periodiza¬ción sociohistórica donde quedan definidos la ilustración, un período moderno temprano, el modernismo y el posmodernismo. Lash dedi¬ca particular atención a las transiciones que llevan de un momento a otro de esa vasta época. Este método tiene como resultado la viva iluminación de un presente cuya diná¬mica se comprende mejor tras la lectura de este libro verdaderamente capital. Scott Lash es profesor de sociología en la Universidad de Lancaster. Su mirada de sociólogo define la estética posmodernista y la correlaciona con prácticas sociales que son propias del actual capitalismo desorga¬nizado. Las nuevas relaciones de producción presentan cada vez más un aspecto de dis¬curso, de comunicación. El capital se acu¬mula con modalidades que traen consigo una profunda trasformación de la estructu¬ra social. Y las nuevas clases y los fragmen¬tos de clase, que se relacionan sobre todo con la producción de signos, son los susten¬tos del posmodernismo cultural. Es generoso Scott Lash en el estudio de los aspectos analíticos; ofrece ideas ori¬ginales sobre muy diversas cuestiones. La semiótica ve especificadas sus categorías sobre el escenario de lo social y lo cultu¬ral. La noción de alegoría de Benjamín ad¬quiere valor de análisis sociohistórico. El estudio comparativo de la evolución urba¬na de París, Berlín y Viena muestra lo específico de cada modernismo y las rela¬ciones entre la contradicción cultural y las contradicciones sociales bajo el capitalis¬mo. Un análisis del surrealismo descubre en las ideas y las prácticas de la vanguardia estética los anuncios de la posmodernidad. La evolución del cine se analiza desde un predominio modernista del relato sobre el espectáculo hasta el cine actual, donde ese predominio se invierte. Cruza estos análisis un cotejo entre la Teoría Crítica, hoy representada por Habermas, y los ya citados pensadores del posmodernismo francés. 'La trayectoria de ese cotejo recibe su luz desde Weber para culminar en una reapreciación de la sociología de Bourdieu. Estos autores piensan la posmodemidad, y Lash se esfuerza en mostrar la manera en que la posmodernidad se piensa en ellos. Es una posmodemidad bifurcada entre una corriente que convalida la mercantilización de la vida y otra que entrevé horizontes históricos nuevos. Uno de los aportes más originales de Scott Lash es su definición de la idea de cultura en teoría social. Se puede estudiar su aplicación en este libro. Parece tener una fuerte relación con la concepción kantiana de lo estético que crece en un mundo emergente entre razón práctica y razón pura. Impresiona aquí, por fin, un diestro vaivén analítico entre razón sustantiva y razón instrumental, status y contrato, comunidad y sociedad, que de repente dibuja ante nosotros la silueta de algo tercero que supera las polaridades.