La autora aborda el estudio de estos delitos desde un punto de vista teórico y práctico, explorando sus fundamentos, clasificaciones y las complejidades que surgen en su aplicación. Huerta Tocildo desglosa los elementos constitutivos de los delitos de omisión, diferenciando entre la omisión pura o propia, en la que el simple no actuar constituye el delito, y la omisión impropia, donde la inacción genera un resultado equivalente al producido por una acción delictiva (por ejemplo, un delito de comisión por omisión). La autora profundiza en el debate doctrinal sobre cuándo y cómo se puede imputar penalmente a una persona por no actuar y cuáles son los criterios para establecer un deber jurídico de actuar. El libro también examina casos prácticos y jurisprudencia relevante para ilustrar cómo los tribunales abordan los delitos de omisión, destacando las dificultades probatorias y la interpretación judicial sobre la existencia de un deber de actuar. Huerta Tocildo analiza los elementos subjetivos y objetivos necesarios para la configuración de estos delitos, incluyendo el dolo y la negligencia.