El 11 de septiembre, aquel del que menos se habla, 1973el gobierno democrático de Salvador Allende fue derrocado por un golpe militar financiado, organizado y liderado por el gobierno de los Estados Unidos atreves de su agencia central de inteligencia (CIA). El plan en contra del presidente socialista fue diseñado en términos de una guerra encubierta que según un memorándum firmado por Henry Kissinger el 17 de noviembre de 1970, tenía los siguientes cinco pasos: Acción política para dividir y debilitar la coalición de Allende. Mantener y ampliar contactos con militares chilenos. Ofrecer apoyo a grupos y partidos políticos opositores no marxistas. Ayudar a ciertos periódicos y utilizar ciertos medios de comunicación en Chile que puedan criticar al gobierno de Allende. Utilizar medios de comunicación seleccionados (en América Latina, Europa y otras partes) para descartar la subversión del proceso democrático de parte de Allende y la intervención de Cuba y la Unión Soviética en Chile. En ese mismo sentido el informe Church, evacuado de la investigación llevada a cabo por un comité del Senado estadounidense, señala la siguiente sobre la relación entre la CIA y uno de los principales promotores del golpe contra Allende, el diario chileno Mercurio. Las líneas con las que se inicia este trabajo describen en un caso paradigmático y no por ello aislado, la importancia, la influencia, los interese y métodos desde el ejercicio de la prensa y desde los poderes que la instrumentalizan con el propósito de preservar o imponer un sistema económico, político y militar. Durante la trágica experiencia chilena por supuesto que además de la violencia y la influencia de los medios jugaron un rol preponderante todos los esfuerzos para atacar la economía chilena y los afanes desestabilizadores de la denominada extrema izquierda en contra de Allende. Sin embargo el papel de los medios en ese y otros momentos no ha sido ni es un tema menor. Para que el golpe militar del 11 de septiembre de 1973, alcanzara su objetivo de derrocar a un gobierno democráticamente elegido, fueron tan importantes los tanques, los aviones bombarderos y los fusiles, así como los llamados periodistas, las primeras planas y la campaña mediática.