En esta obra, Francisco Javier Matía Portilla analiza el desarrollo, reconocimiento y protección de los derechos fundamentales dentro del sistema jurídico de la Unión Europea (UE), enfocándose en cómo estos derechos han pasado de ser principios generales del derecho a ocupar un lugar central en el ordenamiento jurídico comunitario, especialmente a partir de la aprobación de la Carta de los Derechos Fundamentales de la Unión Europea. 1. Evolución histórica del reconocimiento de derechos en la UE: En los primeros tratados fundacionales (como el Tratado de Roma), los derechos fundamentales no tenían un reconocimiento explícito. Fue la jurisprudencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) la que comenzó a reconocerlos como principios generales del Derecho. Se inspiraban en las tradiciones constitucionales comunes de los Estados miembros y en el Convenio Europeo de Derechos Humanos (CEDH). 2. Carta de los Derechos Fundamentales de la UE: Adoptada en el año 2000 y con fuerza jurídica vinculante desde el Tratado de Lisboa (2009). Supone un avance clave en la protección de los derechos en la UE, al integrarlos formalmente en su estructura legal. Matía Portilla destaca que esta carta no sustituye a las constituciones nacionales ni al CEDH, pero complementa la protección de los derechos en el ámbito europeo. 3. Papel del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE): Tiene una función clave en la protección judicial de los derechos fundamentales. El autor subraya que el TJUE ha desarrollado una rica jurisprudencia en materia de derechos, interpretando los tratados y la Carta de los Derechos. Se busca garantizar la coherencia entre el derecho europeo y los sistemas nacionales. 4. Relación con el Convenio Europeo de Derechos Humanos (CEDH): La UE no es aún parte formal del CEDH, pero el TJUE utiliza sus principios y jurisprudencia como referencia. Existe una estrecha colaboración entre el Tribunal de Estrasburgo (TEDH) y el TJUE, aunque también algunas tensiones jurisdiccionales. 5. Límites y desafíos actuales: Matía Portilla advierte sobre los límites en la aplicación de los derechos fundamentales, ya que la Carta solo se aplica cuando los Estados miembros actúan en el marco del Derecho de la UE. Existen desafíos importantes, como: La armonización de derechos en sistemas jurídicos muy diversos. El auge del populismo y los retrocesos democráticos en algunos países. El equilibrio entre seguridad y libertades, especialmente tras crisis como el terrorismo o la pandemia. Conclusión: Francisco Javier Matía Portilla concluye que, aunque la protección de los derechos fundamentales en la UE ha avanzado significativamente, todavía enfrenta retos importantes. La consolidación de un verdadero sistema europeo de derechos requiere una mejor articulación entre los tribunales nacionales, el TJUE y el TEDH, además de una firme voluntad política para garantizar el respeto efectivo de los derechos en todos los niveles.