El autor parte de la concepción del Estado como una estructura de poder organizada y con autoridad legítima para establecer y hacer cumplir normas, y analiza cómo el derecho actúa como un instrumento fundamental para regular las relaciones entre los ciudadanos y el Estado. Trujillo aborda temas clave como el origen y la evolución histórica del Estado, las diferentes formas de gobierno, y el papel del derecho en la consolidación de un Estado de derecho, donde las leyes se aplican de manera justa y equitativa. Además, el libro explora la importancia de los derechos fundamentales y de las instituciones democráticas para asegurar la protección de los ciudadanos frente a posibles abusos de poder. Trujillo Muñoz enfatiza que el derecho debe servir como un límite y un equilibrio para el poder estatal, promoviendo así la justicia y el bienestar social.