Esta obra debe llegar a todos quienes tienen que ver con el derecho y no precisamente constituye otra de texto pedagógicamente estructurado. Constituye solo una justificación de la veraz existencia del Derecho Procesal y es recomendable para abogados y quienes tienen que ver con la enseñanza universitaria, especialmente; y por qué no también para jóvenes universitarios si son ellos los que tienen el deber de fijar los parámetros de la nueva súper-estructura jurídica nacional; extender los lazos de un Derecho que comparta con todos y en igualdad de condiciones, que todos tengan derecho a la vida y a la libertad pero en las más altas condiciones de vida y libertad.